El Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid (a través de su Instituto de Investigación Sanitaria, IIS-, gestionado por el grupo sanitario Quirónsalud, la Clínica Universidad de Navarra (CUN), y los hospitales Clínico de Salamanca y General Universitario Gregorio Marañón de la capital han liderado una investigación multicéntrica de terapia celular con células madre procedentes del tejido adiposo para el tratamiento de pacientes graves de la Covid-19, en la que mostraron cómo este tipo de células mejoran el pronóstico de pacientes graves.
Mediante un programa de uso compasivo autorizado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), los investigadores mostraron que en el 75 por ciento de los pacientes tratados con esta terapia disminuyó la inflamación y aumentó la actividad de su sistema inmunitario. Esta investigación se acaba de publicar en la revista EClinicalMedicine, que pertenece al grupo The Lancet.
Aunque los pacientes incluidos en este estudio se trataron únicamente en los cuatro centros mencionados, en este trabajo colaboraron investigadores del Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia, la Universidad Complutense de Madrid (UCM), el Hospital General Universitario de Alicante y los centros de investigación Cima Universidad de Navarra y el Instituto de Bioingeniería Universidad Miguel Hernández de Elche.
Estos centros pertenecen a la Red Nacional de Terapia Celular (TerCel) y a dos Centros de Investigación Biomédica en Red, el de Enfermedades Respiratorias (CIBERES) y Cardiovasculares (CIVERCV), todo ellos pertenecientes al Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
Ventajas de las células madre mesenquimales
Esta investigación evaluó la tolerabilidad y seguridad de la administración a los pacientes de células madre mesenquimales derivadas del tejido adiposo. Las células madre mesenquimales, conocidas como multipotentes, pueden diferenciarse en diversos tipos celulares manteniendo una alta capacidad de renovación.
Las procedentes de las células del tejido adiposo (adipocitos) tienen efectos antiinflamatorios e inmunomoduladores, son de fácil acceso y presentan una gran capacidad de expandirse -también en el laboratorio- durante periodos de tiempo largos sin perder sus características.
“La terapia avanzada con células madre mesenquimales ya está aprobada para algunas enfermedades inflamatorias. A su vez, existe evidencia preclínica de que la administración intravenosa de esta terapia celular en modelos de infección respiratoria causada por virus reduce el daño pulmonar. Por este motivo, junto con el hecho del papel de la inflamación en la patogenia del daño pulmonar asociado al SARS-CoV-2, pensamos que esta terapia podría ser una alternativa beneficiosa para los pacientes graves de Covid-19”, señala el doctor Felipe Prósper, que es investigador senior del Cima.
Esta investigación presenta los resultados de un estudio en el que, por primera vez, se trataron con células madre mesenquimales a los pacientes de la Covid-19 sometidos a ventilación mecánica. Según el jefe del Servicio de Cardiología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, el doctor Francisco Fernández-Avilés, “en nuestras unidades de Producción Celular, hemos podido almacenar estas células madre y disponer de ellas para administrarlas a los 13 pacientes participantes en el estudio. Todos ellos se encontraban en estado crítico y habían recibido tratamiento previamente con antivirales y antiinflamatorios, protocolo terapéutico que se está empleando hasta el momento para combatir la enfermedad”.
