La atención a pacientes crónicos en España ha recibido un renovado impulso con la reciente publicación de la Declaración de Mérida, un esfuerzo colaborativo entre la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc). Este documento, que enfatiza la importancia de la atención integral y coordinada, busca establecer nuevas directrices que aborden las complejidades y los desafíos que enfrentan los pacientes crónicos en el sistema de salud actual.
Un compromiso por la atención integral
La Declaración de Mérida reconoce la creciente importancia de proporcionar cuidados continuos y holísticos a los pacientes crónicos. Este enfoque no solo busca mejorar la calidad de vida de los pacientes, sino también optimizar los recursos del sistema de salud, reduciendo hospitalizaciones innecesarias y promoviendo un manejo más eficiente de las enfermedades crónicas.
Coordinación y personalización del tratamiento
Uno de los pilares fundamentales de esta declaración es la necesidad de una mejor coordinación entre los diferentes niveles de atención médica. La colaboración entre médicos de atención primaria y especialistas es clave para asegurar que los pacientes reciban un tratamiento personalizado que aborde sus necesidades específicas. Asimismo, la tecnología juega un papel esencial en la implementación de estas mejoras, facilitando la comunicación y el seguimiento de los tratamientos.
Formación y sensibilización
La Declaración de Mérida también subraya la importancia de la formación continua de los profesionales sanitarios en el manejo de enfermedades crónicas. Además, destaca la necesidad de sensibilizar a la población sobre la importancia de la prevención y la detección temprana de estas condiciones. De esta manera, se espera no solo mejorar la atención médica, sino también empoderar a los pacientes en la gestión de su propia salud.