El Sindicato Médico Andaluz ha levantado la voz para solicitar cambios significativos en el proceso de contratación de Médicos Internos Residentes (MIR) de último año. La propuesta busca que estos profesionales, tras una sólida formación a lo largo de sus prácticas, sean incorporados al sistema sanitario andaluz con contratos como médicos adjuntos. Este movimiento, según indican desde el sindicato, permitiría aprovechar al máximo las capacidades de estos médicos, integrándolos eficazmente en el engranaje del sistema de salud.
Razones detrás de la demanda
El sindicato expone que los MIR de último año han adquirido una experiencia valiosa durante sus años de formación y están más que preparados para asumir mayores responsabilidades dentro del sistema de salud. Actualmente, al finalizar el periodo de residencia, muchos de estos profesionales enfrentan contratos precarios o subóptimos que no reflejan su nivel de capacitación. Por lo tanto, proponen que al menos durante los primeros años post-residencia, estos médicos sean empleados como adjuntos, lo que no solo mejorará sus condiciones laborales, sino que también beneficiará al servicio de salud al contar con personal capacitado y motivado.
Impacto en el sistema de salud
Integrar a los MIR de último año como médicos adjuntos podría aliviar las cargas laborales en diversos centros sanitarios. La sobrecarga de trabajo y la falta de personal son desafíos constantes para el sistema de salud que, según el sindicato, podrían mitigarse al incorporar a estos médicos recién formados de manera más efectiva. Esto no solo optimizaría el servicio recibido por los pacientes, sino que también podría reducir los tiempos de espera y mejorar la calidad de atención.